Muchos son los novios los que nos preguntan por tabaco, puros para celebraciones, que puro poner en bodas o incluso si pasa algo si no ponéis puros en vuestra celebración.
· Poner puros falsos: Es muy cutre y quedas como tal. Es mejor no poner cigarrillos que poner algo falso para aparentar, cualquier aficionado con algo de vista y gusto pillará rápidmente el engaño y quedarás retratado.
· Poner malos Tabacos: No hablamos de precio sino de calidad, ya que últimamente han aparecido excelentes tabacos premium a un precio muy competitivo.
· Pasarse con el tamaño y/o Fortaleza: En este tipo de eventos, menos es más. El tiempo de fumada es tiempo que tus invitados pasarán separados del resto de la fiesta. A su vez, muchos de ellos serán fumadores poco habituales y meterles una ‘estaca’ de hora y media de fumada o un tabaco excesivamente fuerte les llevará a acabar dejando el cigarro a medias y terminar con un mal recuerdo.
· Poner un Cigarro superpremium: Tan malo es quedarse corto como pasarse.
· Ve a una cava y déjate asesorar. Una cava es como una bodega, los tabacos están perfectamente cuidados y el liador de puros te aconsejará.
· Elige más de un formato: Si eliges un apr de vitolas distintas, una pequeña y potra mediana el abanico de fumadores se multiplica.
· No sólo existen los habanos: Si son los más conocidos pero no siempre son los mejores para estos casos. Dominicanos, nicaragüenses hondureños, mexicanos.. Son muchas las opciones a valorar.
· Pon un liador de puros: habilitar una sección de tabacos en un lugar propiuo, a parte de ser elegante y bonito, permite no repartir puros a todos los asistentes y que los aficionados tengan un punto de reunión y disfrutar su pasión.
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